La ambientación juega un papel muy importante en una sala. Los escapistas más experimentados no solo quieren enigmas que los atrapen, sino que todo tenga un sentido dentro de la ambientación. Y los jugadores que empiezan en el mundillo buscan un recuerdo inigualable. Por eso vamos a analizar los componentes que generan una inmersión completa en un escape room.
La experiencia del escapista
Es cierto que en la zona de Valencia el boom del escape room no es tan grande como en Barcelona o Madrid. Por lo que si los jugadores tienen que escoger un escape room en Gandía, buscarán alguno que les atrape. Que las reseñas indiquen que mientras jugaban se les ha pasado el tiempo volando. Y uno de los factores con los que se consigue es la inmersión.
Piensa que no solo tienes que hacer una inversión en los puzzles y enigmas del juego. Estos son la piedra fundamental de tu escape room, sí, pero debes presentárselo como un regalo. Bien envuelto y con un lacito, que se note el mimo y cariño que le has puesto en ello. Y con la inmersión consigues este efecto. Envuelves a tus jugadores en una historia que les enganche.
3 componentes que generan una buena inmersión
La inmersión tiene tres piezas fundamentales. Todas parten de la idea inicial que tenías de la sala. Pero ¿qué quieres transmitir con tu juego? ¿Qué hace que tu escape room sea especial?
La historia
En toda aventura siempre nos cuentan una historia en la que sentirnos identificados como los protagonistas. Muchas veces los jugadores conciben que la sala que estamos haciendo se trata de “un laboratorio más”. Y eso es lo que tienes que evitar.
Tu historia debe poseer un gancho argumental para que les saque esa ansia de competición. Trabaja en un relato con emoción e intriga. Que al leer de qué va tu escape room tengan ganas de saber más. Y que cuando estén jugando sientan que de verdad forman parte de esa aventura.
La escenografía
Los primeros escape room eran sencillos a nivel de decoración. Una sala prácticamente blanca, con armarios y puertas llenas de candados. Y esto a día de hoy echa para atrás a cualquier cliente potencial.
Piensa que los escapistas van a pasar una hora encerrados en tu sala y, por lo tanto, tu ambientación lo es todo. Prepara una lista con los objetos clave de tu historia. Tendrás mucho trabajo por delante para que todo quede perfecto. Y cuida los detalles. Porque si lo haces, conseguirás que el grupo sienta que forma parte de la historia y se centrará en jugar. Y así desconectará del mundo exterior.
El game master
Se trata de la toma de contacto que tienen con la sala y, por lo tanto, pieza fundamental en el juego. El game master puede añadirle un punto extra a la inmersión e ir disfrazado para la ocasión.
Muchos de los jugadores que van por primera vez a un escape room se quedan alucinados si se encuentran con este añadido. Porque lo viven desde el instante en el que abren la puerta. Olvídate de la charla de los candados e integra las pautas de seguridad y recomendaciones en el monólogo de presentación.
Conclusiones
Una buena inmersión hará que tus clientes salgan el doble de satisfechos, hayan conseguido o no su objetivo dentro de la sala. Piensa que es una experiencia que no volverán a sentir. Así que haz que se lo pasen lo mejor posible. Y esto, si cuentas con más de una sala, te asegurará que quieran repetir.
¿Qué detalles crees que consiguen un efecto de inmersión completo?
Ven a Cronoroom
En Cronoroom, nuestro escape room en Gandía, queremos que tu experiencia sea única e inolvidable. Por eso cuidamos con tanto mimo todos los detalles que hacen que la inmersión del juego sea impecable.
Descúbrelo con tus amigos y familia en nuestro hall escape El tesoro del jaguar. Viaja hasta la selva profunda y adéntrate en las ruinas de una civilización maya. Aquí, encontrarás un antiguo campamento abandonado, donde los exploradores intentaron descubrir los misterios que escondía este antiguo templo. ¿Conseguirás llevarte el tesoro y salir de una pieza?
